27 de enero 2013

Un extracto de la plática de John Main OSB, 'Healthiness of Spirit' de las series 'Fully Alive', Talk Series 2011-D, Oct-Dic (Londres: WCCM, 2011), pp. 9-10.

Un problema grande que todos tenemos que enfrentar en nuestra vida es el decidir que es lo verdaderamente importante en ella y que es trivial, hay que aprender a diferenciar entre lo que solo está de paso y lo que permanece.

Juan de Salisbury, escritor medieval inglés, escribió: Para el que con todo su corazón busca la verdad, no es posible cultivar lo que está simplemente vacío. Este es el reto que cada uno de nosotros tiene que enfrentar: no cultivar lo que está vacío porque con nuestro corazón siempre buscamos la verdad, el amor. El meditar es muy importante para cada uno de nosotros porque vivimos en una sociedad que se encuentra en peligro de perder su cordura. Un espíritu humano sano demanda expansión. Todos necesitamos espacio para respirar, para crecer, para llenar nuestras vidas de verdad y amor. Y si estamos sanos, sabemos que hay que cruzar las fronteras para llegar a  lo que está más allá. Un espíritu que es sano es el espíritu de un explorador: no nos aterroriza lo que hay mas allá, no estamos tan cansados que no podamos ver lo que está allá adelante. El espíritu que está realmente sano sabe que no hay futuro para nosotros a no ser que nos entreguemos con todo el corazón. El meditar es simplemente el camino para alcanzar ese espíritu sano, ese estado donde nuestro espíritu tiene espacio para respirar, donde no se ve presionado o asaltado por las trivialidades o lo que es solamente material; un estado donde, porque estamos abiertos a la verdad total y al amor total, estamos llamados más allá de la simple trivialidad. Estamos llamados a vivir la vida no desde la orilla sino desde la fuente. La última frontera que estamos llamados a cruzar es la frontera de nuestra propia identidad, en otras palabras, nuestro propio límite. Ser uno con todo, ser uno con el Todo. Practicar desde la profundidad de nuestro propio ser lo que Jesús nos llama a hacer: el que quiera salvar su vida, debe perderse. La disciplina del mantra y la disciplina del regreso diario a la oración es simplemente el compromiso de dejar a un lado todo lo que es pasajero y vivir la vida desde la fuente del ser. Por eso debemos dejar atrás todas las imágenes, todas las ideas e imaginaciones; y debemos permanecer en silencio, tan profundamente como podamos, en la presencia del autor de la vida, el autor del amor. Después de la meditación: un extracto de "Acts of Love", Christopher Hedges, en Truthdig.com,  2.19.12 El ser humano aislado nunca puede ser totalmente humano. Y para los que se distancian de los otros, para los que están separados del mundo alrededor de ellos, los falsos acuerdos de raza, nacionalismo, la causa gloriosa, el género y la clase, compiten, con mucha ventaja contra la alianza del amor. Esas otras alianzas, que vemos enfrente de nosotros a diario, se basan en la exclusión y el odio en vez de la universalidad. Estas falsas alianzas  no nos llaman a la humildad y la compasión, a un reconocimiento de nuestras propias imperfecciones, sino a una forma de auto-exaltación disfrazada de amor. Sólo aquellos que están afianzados en el amor son capaces de trascender estas falsas alianzas...

 

Traducido por Enrique Lavin