Cuatro nuevos oblatos de habla hispana
El sábado 18 de agosto 2018, en el marco del retiro “Luces y sombras” conducido en Argentina por el P. Laurence Freeman OSB, durante la misa, luego de la lectura del Evangelio, cuatro meditadores novicios del Oblatado WCCM, Carlos Juarez, Juana Paez, Luis Álvarez y Raúl Pavón, realizaron su oblación final, es decir, su consagración laical de vida al Señor en seguimiento de la Regla de San Benito y en servicio de la Comunidad y de la humanidad.
Carlos, Juana y Luis residen en Argentina, Raúl vino especialmente desde Ecuador para realizar su oblación final. Juana y Luis son un matrimonio: Juana esperó a Luis en su camino del Oblatado para realizar juntos su oblación. Con este acontecimiento, en Argentina ya somos 6 los oblatos de la WCCM, y el primero en Ecuador. Hay una oblata en Paraguay y otros 6 en Venezuela, así como un par de novicios (México y Colombia) y varios postulantes (de México, Chile y España), en cuanto a los integrantes de lengua española.
La ceremonia incluyó una oración inicial en que pedimos abrir nuestros corazones y nuestras mentes a la llamada del Evangelio y pedimos una escucha más atenta al propósito de amor del Señor en nuestras vidas. Luego cada nuevo oblato leyó unos versículos del capítulo de la Regla que se refiere a la recepción de nuevos hermanos y hermanas, y el P. Laurence preguntó a cada uno de ellos qué pide a la Comunidad. En su respuesta, cada cual pide la aceptación de la ofrenda final comprometiéndose a seguir el espíritu de la Regla y las enseñanzas de la Comunidad.
A continuación todos los presentes renovamos las promesas del Bautismo como discípulos de Cristo, dedicándonos a la construcción de la familia humana en paz y amor. Sigue la oblación final que cada nuevo oblato lee desde el documento que preparó a ese efecto, firma su compromiso, se aceptan las oblaciones y se les da la bienvenida al Oblatado de la Comunidad, colocando los documentos sobre el altar en que sigue celebrándose la Eucaristía. Por último el celebrante bendice las cruces que les son entregadas a cada nuevo oblato y da la bendición final.
Es una ceremonia de profundo significado en la vida de cada consagrado y en su compromiso de seguimiento del Señor y servicio a la Comunidad y a la humanidad en general.
Para llegar a esta Oblación cada cual recorrió un camino en que medita diariamente por la mañana y por la tarde o la noche, acompañando su meditación con dos lecturas litúrgicas, lee diariamente un fragmento de la Regla de San Benito con su comentario actualizado, y se reúne regularmente en forma presencial o virtual con su mentor o mentora (acompañante espiritual) y con sus compañeros del camino del Oblatado para profundizar y compartir su formación y su compromiso con la Comunidad.
El Oblatado comenzó en Argentina con el camino y la oblación final realizada por quien les escribe durante el retiro del año 2011 realizado en La Falda, Provincia de Córdoba, con el mentorado de Trish Panton, entonces coordinadora internacional del Oblatado WCCM.
A principios de 2013 comenzó a reunirse cada dos meses el grupo de Argentina, integrado por Norberto Ramírez, Carlos Juarez, Rosa Casco, Juana Paez, coordinado por mí. Posteriormente se unió Luis al grupo. En el primer retiro del Oblatado WCCM de Argentina, realizado en el monasterio de la Trapa femenina durante 2016, hicieron su Oblación Final Norberto Ramírez y Rosa Casco.
“No anteponer nada al amor de Cristo” (Regla de San Benito, 4,21)
Marina Müller
Coordinadora del Oblatado en Argentina