Extracto de John Main OSB, “Letter Four”, “LETTERS FROM THE HEART” (New York: Crossroad, 1988), pp 63-64
El compromiso de la fe no es solamente intelectual o dialéctico. No es que decidamos “creer” en las ideas de la tradición Cristiana. Más bien tenemos el valor, y en un sentido real, la temeridad de abrirnos a lo desconocido, lo incomprensible y verdaderamente misterioso… Nos damos permiso, en el más amplio sentido bíblico, a “conocer” el misterio o, aún mejor, a ser conocidos por el misterio. Permitirnos hacer esto (una mejor forma de decirlo que decir obligarnos a hacerlo) es seguir el principio fundamental del evangelio de volvernos sencillos, volvernos como niños, despiertos. No es una pequeña razón para maravillarnos que a pesar del hecho que…es tan fácilmente olvidado por aquellos que están la corriente prevaleciente de la tradición, que estos son los dogmas fundamentales del evangelio---la fe no es un asunto de esfuerzo sino de apertura.